miércoles, 15 de junio de 2011

CAPERUCITA

Buenas, hoy es el turno de la cuarta cancion de "Atrapados en Azul", la misma se denomina Caperucita: Les dejo la letra y el analisis de la cancion, esperando que compartan conmigo sus opiniones, ideas o agreguen informacion al post.

CAPERUCITA

Disco: Atrapados en azul
Estreno: febrero de 1996
Letra: Ismael Serrano
Música: Ismael Serrano

Caperucita sólo tiene dieciséis
primaveras sin flores, papá le dice: "Ven.
Caperucita eres joven y tienes que aprender
a ocuparte de la casa, que serás una mujer.

Para que seas buena esposa
y no envejezcas sola,
en la cama y la cocina has de saber
alegrar a tu marido y cuidar a cada hijo,
que te atrapa tu destino,
que has de ser madre y esposa".
Y la pobre Caperucita llora.

"Quiero volar, lejos de aquí escapar.
Dime, mi bien, quién me llorará
si me dan alas y echo a volar.
Quiero dormir, no quiero despertar,
quiero ser la lluvia al otro lado del cristal,
quizás alguien me espere en la oscuridad".

Una fría tarde Caperucita iba
a casa de su abuela a llevarle comida,
cuando se encontró con un lobo feroz.
Dime dónde vas niña, que te acompaño yo.

La muchacha se supo perdida.
Gritaba Caperucita
mientras la devoraba el lobo.
Bajo la falda del vestido
estallaron los dormidos
sueños que en la noche
la mantenían viva. Pobre Caperucita.

"Quiero volar, lejos de aquí escapar.
Dime, mi bien, quién me llorará
si me dan alas y echo a volar.
Quiero dormir, no quiero despertar,
quiero ser la lluvia al otro lado del cristal,
quizás alguien me espere en la oscuridad".

Una gris mañana Caperucita se casó,
vestida de blanco, bella como una flor.
Su marido, muy elegante, otro lobo feroz,
y su padre orgulloso lloraba de emoción.

Ahora cada noche el lobo la devora,
clava sus dientes, y llora
Caperucita mientras espera a que un aullido
le diga que el dormido animal despertó.
Después descansa tranquilo el malvado lobo feroz.

La cara de Caperucita alumbra una sonrisa
mientras mece una cuna. En ella está una niña,
quizás futura oveja para un lobo feroz,
a no ser que afortunada la rescate tu amor.

Caperucita la arrulla contra el pecho
y un murmullo lento y lleno
de esperanza y vida,
canta Caperucita.

"Quiero volar, lejos de aquí escapar.
Dime, mi bien, quién me llorará
si me dan alas y echo a volar.
Quiero dormir, no quiero despertar,
quiero ser la lluvia al otro lado del cristal,
quizás alguien me espere en la oscuridad.

Quiero volar".

Caperucita

Comentario de Ismael

Somos muchos los que hemos crecido con el cuento de caperucita. Muchas noches, de pequeños, se nos lo leía y quedábamos dormidos compadeciéndonos de la pobre caperucita. Pero no todas las caperucitas consiguen comer perdices, muchas de ellas viven todavía entre las garras de sus lobos, y muchas veces, aún, el lobo se come a la pobre caperucita.
Os podría contar cualquier caso de las caperucitas de todo el mundo, pero prefiero que un compositor muy bien dotado, Ismael Serrano, os haga una excelente reflexión. Se siente, se sabe y se escucha...no hace falta melodías para entenderlo.

Caperucita Roja es una fábula transmitida de manera oral en gran parte de Europa y luego en escritos. El relato marca un claro contraste entre el pueblo seguro y el peligroso bosque, normal antítesis del mundo medieval.
Había una vez una niña muy bonita. Su madre le había hecho una capa roja y la muchachita la llevaba tan a menudo que todo el mundo la llamaba Caperucita Roja.
Un día, su madre le pidió que llevase unos pasteles a su abuela que vivía al otro lado del bosque, recomendándole que no se entretuviese por el camino, pues cruzar el bosque era muy peligroso, ya que siempre andaba acechando por allí el lobo.
Caperucita Roja recogió la cesta con los pasteles y se puso en camino. La niña tenía que atravesar el bosque para llegar a casa de la Abuelita, pero no le daba miedo porque allí siempre se encontraba con muchos amigos: los pájaros, las ardillas...
De repente vio al lobo, que era enorme, delante de ella.
- ¿A dónde vas, niña? - le preguntó el lobo con su voz ronca.
- A casa de mi Abuelita - le dijo Caperucita.
- No está lejos - pensó el lobo para sí, dándose media vuelta.
Caperucita puso su cesta en la hierba y se entretuvo cogiendo flores: - El lobo se ha ido -pensó-, no tengo nada que temer. La abuela se pondrá muy contenta cuando le lleve un hermoso ramo de flores además de los pasteles.
Mientras tanto, el lobo se fue a casa de la Abuelita, llamó suavemente a la puerta y la anciana le abrió pensando que era Caperucita. Un cazador que pasaba por allí había observado la llegada del lobo.
El lobo devoró a la Abuelita y se puso el gorro rosa de la desdichada, se metió en la cama y cerró los ojos. No tuvo que esperar mucho, pues Caperucita Roja llegó enseguida, toda contenta. La niña se acercó a la cama y vio que su abuela estaba muy cambiada.
- Abuelita, abuelita, ¡qué ojos más grandes tienes!
- Son para verte mejor - dijo el lobo tratando de imitar la voz de la abuela.
- Abuelita, abuelita, ¡qué orejas más grandes tienes!
- Son para oírte mejor - siguió diciendo el lobo.
- Abuelita, abuelita, ¡qué dientes más grandes tienes!
- Son para...¡comerte mejoooor! - y diciendo esto, el lobo malvado se abalanzó sobre la niñita y la devoró, lo mismo que había hecho con la abuelita.
Mientras tanto, el cazador se había quedado preocupado y creyendo adivinar las malas intenciones del lobo, decidió echar un vistazo a ver si todo iba bien en la casa de la Abuelita. Pidió ayuda a un segador y los dos juntos llegaron al lugar. Vieron la puerta de la casa abierta y al lobo tumbado en la cama, dormido de tan harto que estaba.
El cazador sacó su cuchillo y rajó el vientre del lobo. La Abuelita y Caperucita estaban allí, ¡vivas!.
Para castigar al lobo malo, el cazador le llenó el vientre de piedras y luego lo volvió a cerrar. Cuando el lobo despertó de su pesado sueño, sintió muchísima sed y se dirigió a un estanque próximo para beber. Como las piedras pesaban mucho, cayó en el estanque de cabeza y se ahogó.
En cuanto a Caperucita y su abuela, no sufrieron más que un gran susto, pero Caperucita Roja había aprendido la lección. Prometió a su Abuelita no hablar con ningún desconocido que se encontrara en el camino. De ahora en adelante, seguiría las juiciosas recomendaciones de su Abuelita y de su Mamá

COMENTARIO PROPIO:
Es una canción dedicada al maltrato contra la mujer y la diferencia de género donde Ismael expone claramente el dominio de los hombres sobre las mujeres sometiéndolas a realizar cosas, obligandolas y como en el caso de esta canción, como el padre ya desde pequeña le quiere imponer que debe ser "sirvienta" de su marido y que debe cocinar y cuidar a los hijos como si ese fuera el único campo en la que una mujer puede desarrollar sus actividades y sus habilidades.
Ismael muestra el deseo de lasmujeres deescapar de ese encierro o exclavitud, la esperanza de ser libres y poder decidir su propio camino.
Ismael tambien deja abierta la esperanza a que alguien rescate a posibles futuras ovejas de las garras de los lobos feroces, apostando a un amor verdadero y no por conveniencia.

3 comentarios:

  1. Gracias por compartir esta información sobre estas canciones, Pablo. Es siempre interesante hallar un rincón donde disfrutar de la calma, el compromiso y la poesía envuelven los trabajos de Ismael. Además, hoy más que nunca es preciso reflexionar, y eso va ligado a la carrera musical de este cantautor.

    No te desanimes si acaso no llegan las visitas o los comentarios que esperabas. Todo se andará.

    Gracias de nuevo.

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  2. Gracias Jaime por pasar y compartir cosas sobre mi gran idolo Ismael.
    Trato de aportar algunas cosaspara que sepamos el significado de las palabras o los personajes o momentos historicos a los que Ismael hace referencia en sus canciones.
    Te mando un gran saludo y seguimos en contacto.

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  3. Esta camción de Serrano, me fue de mucha utilidad para escribir "el sistema patriarcal autoritario, o SPA para caballeros".

    Hermosa canción, bella letra.

    saludos cordiales.

    g

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